El estrés es la enfermedad más común de nuestros días y se desarrolla especialmente en contextos laborales. Es una patología emergente que tiene una especial incidencia en aquellos trabajos que se basan en relaciones entre personas. Siendo el riesgo mayor en las tareas que requieren mayores exigencias y dedicación.
En el estrés intervienen los estresores, las estrategias de afrontamientos, los indicadores de nuestro nivel de estrés y nuestra propia percepción. Las habilidades sociales que tengamos, para manejar situaciones conflictivas que precisen de respuestas asertivas, son la clave para reducir el nivel de estrés. Ser conscientes de todos ellos y gestionarlos desde un enfoque preventivo y no solo remediativo va a permitirnos mejorar nuestra salud y tener la sensación de dar respuesta a las situaciones de la vida, de un forma proactiva, y no solo a reaccionar ante ellas.
- Mejorar las habilidades sociales para manejar situaciones conflictivas que precisen de respuestas asertivas, y reducir el nivel de estrés.
- Descender el nivel de estrés profesional de los participantes.
- Identificar los factores causantes de estrés en el medio laboral y ser capaz de reducir la ansiedad en diferentes situaciones estresantes del ámbito laboral.
- Comportarse de forma habilidosa socialmente con los usuarios, clientes, compañeros, superiores, etc. y conocer los límites propios y los mecanismos de afrontamiento más adecuados a cada situación y persona.
- Crear y gestionar un plan de reducción de estrés profesional